Sobre Nosotros

La de Talleres del PC podría parecer un historia normal y cotidiana de emprendimiento de chavales normales que prueban suerte en eso del emprendimiento. De hecho quizá no difiera mucho de la de otros valientes. Pero puesto que has llegado hasta aquí, y quieres saber lo que está entre bambalinas, te voy a contar las peculiaridades de esta aventura, si quieres seguir leyendo, para que nos conozcas más y mejor.

Lo cierto es que tras sacar los correspondientes certificados universitarios perfectamente firmados monárquicamente allá por los finales del siglo XX, llegó el  momento de ponerse a producir laboralmente y aportar valor ( y dinero ) a la sociedad por el camino sencillo (que no fácil) del que trabaja para otro.

Casi sinqueriendo transcurrieron 11 provechosos años en una empresa de desarrollo de software teniendo como patrona a Santa Tecla, surfeando con el traje de neopreno de un asalariado más aquellas desconcertantes burbujas de las puntocom, donde tan pronto uno se veía con 50 compañeros más como de repente deshojando los minutos en el puesto de trabajo a que te llamaran los de RRHH – cosa que, por cierto, no llegó a pasar –

Con tanto vaivén difícil de asimilar, afloró un extraño cosquilleo en la tripa, acrecentado por el sentimiento latente de que el tiempo pasaba y el valor que podía y quería aportar a mi vida y al mundo se me escurría entre los dedos, esos que ya no apretaban tantas teclas debido a la sequía producida cuando se cerraron los grifos de los jurdeles y ya no llegaban proyectos bien remunerados que desarrollar (y según los de arriba, no éramos ninguna ONG), que irremediablemente desembocó en la picadura insalvable del gusanillo del emprendimiento.

Era el momento de decidir. Seguir con el hastío diario o ponerse a faenar y tirar p’alante con la epopeya, quemando las naves para no volver atrás. Y hete aquí que, tomada la obvia decisión, no sin cierto nerviosismo, capitalizando las ayudas estatales vigentes por aquel 2006, fundé con otro compañero en situación similar la empresa Invitech Online S.L.

Abrimos un local en la calle Sandoval del madrileño distrito de Chamberí y, muy a lo torero y cambiando de tercio, pasamos de implementar complejos algoritmos de programación a franquiciarnos con un distribuidor informático bastante notable por aquellos tiempos, y de picar tecla a apretar botones ( aún físicos por aquél entonces ) para llamar a los comerciales, comprar, meter un margen y vender informática. Y se vendía. Vaya si se vendía. Mucho.

¡ Pero ay ! Esas vacas gordas de repente dejaron de dar leche. El mundo de los negocios lo definió perfectamente R. Rato con esta sentencia: «Es el mercado, amigo». Nunca hubo tanto significado encerrado en tan pocas palabras. Aun siendo un «qué sabe la gente» en esto de la economía, ya me empezaba a oler la tostada de lo que estaba por venir. Y el agibílubus que uno obligatoriamente lleva dentro como emprendedor empezó a preparar el terreno para el tsunami que se estaba fraguando en la altas esferas económicas.

Hago un inciso. Aunque nuestro camino inicial estuvo 100% enfocado en la venta, fueron los propios clientes quienes cada vez con más asiduidad nos pedían trabajos y servicios de índole informática – configuraciones, montajes, reparaciones – descubriéndonos un camino que no estaba en nuestra hoja de ruta, pero que a la postre nos permitió vadear el temporal que se avecinaba de forma inminente, puesto que pivotamos gradualmente de la venta informática a los servicios tecnológicos, dándole a las reparaciones un peso cada vez mayor.

Y es por ello que estaremos eternamente agradecidos a vosotros, los clientes que acudís a nuestro local a consultarnos, a comentarnos, a conocernos, por habernos abierto los ojos y así vislumbrar la tabla de salvación a la que férreamente nos agarramos.

Fue entonces cuando surgió Talleres del PC, ya como marca e identidad de la empresa que a día de hoy sigue perdurando. Años han pasado desde entonces, con todo tipo de vaivenes, unos mejores; otros peores; traslados, mudanzas de por medio a nuestra actual ubicación en la calle del Cardenal Cisneros, 25, 28010 de Madrid; idas y venidas de magníficos técnicos que han trabajado con nosotros.

Y siempre con la sensación de que el tiempo juega a favor, pues la experiencia acumulada con las miles de reparaciones hechas, con los cientos de proyectos tecnológicos puestos en marcha, con la cantidad de agradecimientos y sonrisas que nos brinda la gente tras haber obrado el «milagro» de resucitar sus equipos o haber podido recuperar lo irrecuperable ( y cuando no, al menos haberlo intentado ). Uséase, sintetizando y tirando de libreta: «la satisfacción del trabajo bien hecho».

Todo esto hace que, no importa lo que haya ahí fuera, llámenlo «desaceleración transitoria», llámenlo «indemnización en diferido», llámese «bicho», o como gusten etiquetar los cuñaos todos estos avatares de la vida, cada día que salga el Sol, aunque sea por Antequera, levantaremos la persiana de nuestro querido Talleres del PC con ilusiones renovadas ya no por el negocio en sí, sino para poder servirte, siendo esta nuestra forma de seguir dándote las GRACIAS.

Misión, Visión, Valores

Como no puede ser de otra forma, Talleres del PC, como marca, se nutre de los mismos preceptos de Invitech Online, empresa de la que forma parte esta línea de negocio, siendo éstos :

Nuestra Misión

Hacer de éste un Mundo mejor y más eficiente gracias a la Tecnología.

Nuestra Visión

Poner la Tecnología al Servicio de las Personas, acercándola a todos.

Nuestros Valores

Transparencia, Innovación, Pasión, Servicio, Ética, Medioambiente y Open Source.

 Parte de los profesionales que formaron parte de Talleres del PC en sus inicios